L’Ollería. Cristo de la Palma.
Siguiendo la CV-640 y dejando tras de sí la antigua
fábrica de toallas El Trovador, entra el caminante en la villa de l’Ollería,
alzada entre los barrancos “La Foya del Port” y “de la Freira”. Las calles El
Ravalet y Pintor Sorolla le conducen al lugar donde se ubicaba el antiguo
cementerio parroquial, mencionado en 1849 por el diccionario Madoz, “de sólida
construcción y espacioso, con su ermita habilitada para celebrar la misa”. Con el traslado del camposanto, posiblemente
fue abandonada, por cuanto Sanchis
Sivera no la menciona. Posteriormente en 1950 fue construido el actual
edificio, siendo durante décadas la última parada de las comitivas fúnebres,
dejando el ataud a los pies del Cristo de la Palma y rezándose un responso.
De gran devoción todos los viernes a las tres de la
tarde sonaba la campana, reuniéndose un grupo de mujeres y cantando en
valenciano “la Mort y Pasió”.
Descansa el peregrino, bajo la sombra de los
árboles, en la pequeña plazoleta. Y allí alza la vista, recreándose en las sencillas
líneas de la fachada.
Pintada de blanco con zócalo gris, decoración crema,
consta de puerta inscrita en el arco formalete, un pequeño óculo o ventana
redonda, cornisa con espadaña en las esquinas por jarrones y rematada por la
cruz.
El interior rectangular es dominado por la hornacina
donde se venera la imagen del Cristo de la Palma.
“Es impresionante su cara muerta, caída sobre el pecho. Da, sin embargo, una
dulce sensación de paz y de sueño deseado. ¡Todo se acabó! Todo se acabó en la
paz honda del que cumplió su deber. Y en ese acabar está la plena felicidad”
(Luis B. Lluch Garin).
Lectura:
Job 30
Oración: Padre,
delante de la imagen oculta a mis ojos por el velo de la fachada, hago mías las
palabras del santo Job: “se ríen de mí…, se alejan de mí horrorizados, escupen
a mi paso sin reparo…, mi vida se diluye…, el mal perfora mis huesos, no
descansan las llagas que me corroen,…” Y permanezco a la escucha, sin mirar el
reloj, esponjando mi corazón con los sentimientos de tu Hijo, expresados en
esta oración.
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